En la mansión Varia era realmente aburrido, usualmente todo estaba muy callado, y nadie estaba en la mansión ultimamente, porque tenían muchas misiones o salían a divertirse o joder a los demás, pero ninguna estaba Fran ya que sus salidas no eran interesantes para el. Sale de la mansión con algunas hojas para hacer pequeñas figuras, después de doblar todos esos cuchillos de plata que le lanzaba Bel-sempai había agarrado un extraño hobby de hacer figuras con papel (origami) para no aburrase. Con una habilidad un poco torpe haciendo un pequeño pato, notando una pequeña mancha roja de sangre, mira indiferente su dedo encontrándose una cortada muy pequeña.
- Uoo… me corte, que triste – dice sin algún expresión de dolo ya que no lo sentía absolutamente nada, si no hubiera sido por la mancha tal vez no se hubiera dado cuenta. Suspira agarrando una bandita que tenía en el bolsillo, aun no podía hacer figuras sin cortarse a veces en cuando, la voltea para ver si era totalmente café notando que tiene muchas figuras de caricaturas para niños en la bandita, seguro algo tenía que ver bel-sempai, sin tomar mucha importancia se lo pone y está dispuesto a seguir caminando , notando que la presencia de dos personas, escuchando gemidos se estremece encontrándose una pareja de amantes besándose y manoseándose, los mira indiferentes y la pareja nota que la mirada de Fran no se quitaba de ahí y se marchan a otro lugar, desvía la mirada sin alguna expresión para no ver los irse y sigue caminando por el parque obteniendo un poco sonrojo al recordar la pareja, negando rápidamente la cabeza preguntándose “Porque no podían irse un lugar menos.. Publico?”. Sigue caminando encontrando una banca.
-Uoo...qué suerte tengo... Una banca para mí solo... Yupi- susurra para sí mismo con sarcasmo caminando hacia ella y sentándose mirando a la nada, saca otra hoja y comienza hacer otra figurita concentrado para que lo hiciera bien, sin algún error.
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